La verdad es que en la actualidad el graffiti no está muy bien visto en la sociedad, solo unos cuantos lo consideran arte. Y de ahí el debate sobre si el graffiti es una forma artística o un entorpecimiento de la estética urbana.
Los ciudadanos se preocupan principalmente por encontrar pintadas en museos y zonas arqueológicas donde evidentemente afean los lugares más representativos de la ciudad, que son a su vez los más transitados por los turistas. También les preocupa que se hagan estas “pintadas” en sus fachadas.
El objetivo es mejorar la imagen de la ciudad para los turistas. Existen dos tipos: los que han sido realizados con permiso de la Administración local ( que están hechos con gracia) y los de mal gusto que “deshonran” a los grafiteros profesionales.
El problema de algunos graffitis es que no siempre se exhiben en los lugares apropiados y hacen que surja ese descontento entre la población.
Pero yo si estoy a favor de los graffitis hechos con permiso y en zonas adecuadas que le dan un toque decorativo a la zona donde se realizan, desde mi punto de vista eso si es ARTE, además de una forma de expresarse.
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